Tratamiento de la enfermedad pulmonar
La enfermedad pulmonar es la causa de muerte número tres en Estados Unidos, responsable de una de cada siete muertes, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. El Departamento de terapia respiratoria del Centro médico del Hospital Summerlin brinda atención especializada para una amplia gama de enfermedades pulmonares como el asma, el enfisema y la bronquitis crónica.
La atención especializada incluye:
- Valoración y tratamiento de enfermedades respiratorias y cardiovasculares.
- Manejo de la vía aérea
- Prueba de gases en sangre arterial
- Pruebas de función pulmonar que incluyen espirometría básica, pletismografía corporal y capacidad de difusión.
- Mecánica respiratoria, incluyendo cumplimiento, resistencia, volúmenes pulmonares, parámetros de destete.
- Terapia con aerosol y broncodilatador
- Ventilación mecánica, tanto invasiva como no invasiva.
- Cuidados críticos neonatales, pediátricos y de adultos.
Asma
El asma es una enfermedad pulmonar crónica causada por la inflamación de los tubos de respiración, lo que conduce a una disminución del flujo de aire hacia los pulmones. Los tubos de respiración son sensibles, hinchados o inflamados en personas con asma la mayor parte del tiempo, incluso cuando no hay síntomas.
El asma se caracteriza por síntomas recurrentes, como tos persistente, sibilancias y dificultad para respirar.
¿Cuáles son los síntomas del asma?
Los síntomas del asma, causados por la inflamación de los tubos de respiración, pueden variar entre las personas y pueden incluir sibilancias, falta de aliento y opresión en el pecho. Otros síntomas de asma pueden incluir problemas para controlar la tos, tos persistente por la noche, dificultad para respirar durante o poco después del esfuerzo físico o ejercicio, o despertarse por la noche debido a uno o más de estos síntomas.
Los episodios de síntomas de asma (también llamados ataques de asma, brotes o exacerbaciones) ocurren cuando las vías respiratorias se estrechan, lo que dificulta la respiración (a veces imposible). Las señales de advertencia de un inminente ataque de asma pueden incluir tos, opresión en el pecho, sibilancias leves, inquietud al tratar de dormir, irritabilidad, picazón en la garganta y ojos llorosos.
¿Qué causa los síntomas y ataques de asma?
Las personas con asma tienen tubos de respiración inflamados que son sensibles a cosas que no molestan a otras personas. Aunque estos "desencadenantes" del asma varían de persona a persona, algunos de los más comunes incluyen:
- Alérgenos, sustancias que causan reacciones alérgicas, que pueden incluir ácaros del polvo, pólenes, mohos, caspa de mascotas y cucarachas y sus desechos.
- Irritantes en el aire, incluido el humo del tabaco, fuegos de leña o parrillas de carbón, así como también vapores u olores fuertes como aerosoles domésticos, pintura, gasolina y perfume.
- Infecciones respiratorias como resfriados, gripe, dolor de garganta e infecciones sinusales. Estos son los desencadenantes más comunes del asma en los niños.
- Ejercicio y otras actividades que hacen que una persona respire más fuerte
- Clima, especialmente viento seco, aire frío y cambios repentinos.
¿Qué sucede durante un ataque de asma?
Durante la respiración normal, las vías respiratorias o los tubos de respiración en los pulmones están completamente abiertos, permitiendo que el aire entre y salga libremente. Pero las personas con asma tienen vías respiratorias hipersensibles inflamadas. Los desencadenantes irritan las vías respiratorias sensibles y:
- El revestimiento de las vías respiratorias se hincha y se inflama aún más.
- El moco obstruye las vías respiratorias
- Los músculos alrededor de las vías respiratorias se tensan (conocido como broncoespasmo)
- Estos cambios estrechan las vías respiratorias hasta que la respiración se vuelve difícil y estresante, y resultan en síntomas de asma.